Biogás: ventajas e inconvenientes

¿Cuáles son las ventajas y desventajas del biogás? ¡Vamos a por una explicación sólida del problema del gas!

El biogás está podrido. Bueno, está podrido – y por eso es genial. De hecho, para obtener biogás, basta con dejar fermentar la materia orgánica en un gran tanque privado de oxígeno (el metanizador). Entonces las pequeñas bacterias trabajan, aumentan la temperatura y producen metano, señala MLG Electrosolar. Este metano puede recogerse y utilizarse exactamente igual que el gas natural al que estamos acostumbrados; puede inyectarse en la red urbana o quemarse para producir calor o electricidad.

Es muy diferente del llamado «gas natural»: un hidrocarburo que hay que extraer del suelo (un poco como el petróleo, que es químicamente bastante parecido). Entonces, ¿por qué elegir un gas en lugar de otro?

Las desventajas del biogás

Nos encanta el biogás, pero no hay una fuente de energía perfecta. Si lo fuera, se sabría. ¿Cuáles son las desventajas del biogás?

Baja disponibilidad

Para fabricar biogás, se necesitan residuos verdes… ¿Y dónde se encuentran más residuos verdes? En la agricultura. Por ello, el biogás se produce con mayor frecuencia mediante la metanización agrícola, con la fermentación de estiércol, purines o incluso orujo de uva…

En la actualidad, hay muy pocas plantas de biogás en España, la mayoría de ellas situadas en explotaciones agrícolas, aunque también hay algunos proyectos que utilizan residuos industriales o municipales. Aunque el biogás es minoritario, también está creciendo con fuerza: es lo que veremos a continuación…

El problema de las molestias

Para un agricultor, el biogás es un regalo del cielo. La planta de biogás procesa los residuos y los transforma en una sustancia de alto valor añadido. Como resultado, algunos agricultores estarían tentados de dirigir su producción… únicamente a este fin. Porque a veces es más rentable vender biogás que vender alimentos. Sin embargo, esto significaría perder de vista el objetivo inicial de la metanización (la recuperación ecológica de los residuos).

Además, el metanizador es una gran instalación que puede afectar al paisaje rural, y algunos vecinos se quejan de ello. Entre las molestias que se mencionan a menudo, también podemos hablar de los olores en las inmediaciones, tanto más cuanto que algunas instalaciones, anticuadas o hechas con prisas, tienen fugas y dejan escapar hasta un 10% del preciado metano.

Tras los inconvenientes, las ventajas del biogás

Bien. Hemos expuesto, con toda transparencia, las pequeñas debilidades de esta energía… Ahora, ¿pueden sus ventajas inclinar la balanza a su favor? Juzgue usted.

Biogás: una energía verde

El biogás es respetuoso con el medio ambiente en comparación con su homólogo el «gas natural». El gas natural tiene que extraerse del suelo mediante procesos complejos y a menudo contaminantes, como la fracturación hidráulica, de la que tanto se habla en la industria petrolera. Y el gas natural no es una fuente de energía renovable; como ocurre con otros hidrocarburos, las reservas se agotan a gran velocidad…

Por el contrario, el biogás puede producirse indefinidamente, ya que forma parte de un círculo virtuoso; ¡mientras haya agricultura, habrá depósitos de biogás!

Y el biogás es ecológico en sí mismo, porque la metanización permite tratar biorresiduos que de otro modo serían muy difíciles de tratar. Por ejemplo, los residuos vegetales suelen quemarse. El estiércol líquido puede esparcirse por los campos, pero entonces contamina la capa freática y los cursos de agua.

La metanización no sólo permite transformar estos residuos en energía, sino que además deja un residuo muy útil: el digestato, que puede utilizarse como abono en los campos… ¡en lugar de los fertilizantes químicos!

Energía local

El biogás puede producirse localmente, cerca de su casa. Y esto tiene dos ventajas:

Evita los costes económicos y ecológicos del transporte de larga distancia.

Recuperamos nuestra independencia energética al dejar de depender de los grandes países exportadores (Rusia, Qatar, Noruega, Canadá, etc.). En estos tiempos de crisis e inestabilidad, ¡es bueno poder contar con nuestros propios recursos!

Una energía que puede integrarse fácilmente en la red

El biogás es químicamente idéntico al gas natural, por lo que es fácil sustituir uno por otro sin que nadie note la diferencia. Además, como el gas se puede almacenar y transportar fácilmente (lo que no ocurre con la electricidad), es más fácil conciliar las variaciones de producción y consumo.

Por lo tanto, se puede aumentar la cantidad de biogás, e incluso alcanzar teóricamente el 100%, sin necesidad de modificar la infraestructura existente.

Ahora ya conoces las características del biogás, sus ventajas e inconvenientes. Entonces, ¿qué opina: está la balanza a su favor? Si te gusta esta energía, apóyala y cámbiate inmediatamente a un proveedor de electricidad respetuoso con el medio ambiente.